Publicado el 15/5/2014
De nuevo se han producido manifestaciones y protestas por todo Estados Unidos en contra de la industria de la comida rápida, una de las más lucrativas de toda la economía, pero conocida por pagar los salarios más bajos.
Miles de manifestantes salieron el jueves a las calles en Estados Unidos para pedir salarios dignos entre los trabajadores de los establecimientos de comida rápida, una de las fuerzas laborales peor pagadas de este país.
Se trata del tercer año consecutivo en el que se celebran este tipo de protestas, que en esta ocasión se han producido en más de 150 ciudades de todo Estados Unidos y en 33 países del planeta. Como siempre, el objetivo principal de los manifestantes es la conocida marca de comida basura de los arcos amarillos.
Se trata de puestos de trabajo muy poco cualificados al que acceden las comunidades más desfavorecidas como los afroamericanos y los inmigrantes, muchos de ellos de origen latino americano.
Desde el amanecer, se produjeron manifestaciones por todo el país. Este es un movimiento de protesta que cada año está mejor organizado y consigue aumentar la presión sobre la industria de la comida rápida, una de las más lucrativas de toda la economía estadounidense.
José Manuel Rodríguez, Nueva York.