Publicado el 1/05/2013
El fascista Manuel Fraga fue durante años jefe de la propaganda del régimen franquista, ocupando diversos cargos, incluido el de ministro de propaganda. El régimen tenía un absoluto control de la información, la libertad de prensa estaba prohibida y todo lo que se publicaba debía pasar previamente por la censura franquista, que decidía lo que se podía publicar y lo que no.
Vemos los preparativos de la grabación de una alocución por parte del dictador militar Francisco Franco, en el palacio de El Pardo de Madrid donde residía, en la que se cuidaban todos los detalles de iluminación y escenografía, supervisados por el jefe de la propaganda del régimen, Manuel Fraga. Son imágenes de gran valor documental porque muestran a estos fascistas tal como eran, ya que ellos sabían que no eran imágenes para emitir, y se puede ver cómo trataban a los trabajadores, con ese aire despótico y gansteril tan propio de ellos. Vemos al dictador fascista con una avanzada edad, seis años antes de morir, en los que no le tembló la mano para reprimir los movimientos sociales ni para firmar sentencias de muerte. Tres años después de estas imágenes, su lugarteniente militar, Carrero Blanco, era volado por los aires en una certera acción militar de la oposición al régimen, que les metió el miedo en el cuerpo y aceleró su proceso de reconversión hacia una seudodemocracia de partidos oligárquicos y corruptos, coronada por un títere en forma de rey, designado por él como sucesor.
Hay que recordar -porque muchos suelen olvidarlo- que en España gobierna actualmente un partido político fundado por este fascista, llamado Partido Popular, lo que no deja de ser un sarcasmo.
